Unos excursionistas dieron la voz de alarma tras hallar varios cuerpos de equinos en noviembre

Las autoridades catalanas decomisaron, el pasado 29 de noviembre, a tres de los nueve caballos que vivían en una hípica del Ripollés cuyo propietario está siendo investigado por maltrato animal.

Fue a principios de noviembre cuando la organización FAADA recibió varios avisos sobre las malas condiciones en las que se mantenía a los caballos de la hípica del Ripollés, así como de la dureza con la que el propietario se comportaba con ellos. Unos excursionistas habían encontrado varios cuerpos de caballos muertos. Tras la recepción de pruebas que mostraban que el propietario disparaba contra los animales, FAADA solicitó una inspección al Cos d’Agents Rurals.

Una primera inspección finalizó con el hallazgo de cadáveres y de caballos en mal estado. En una segunda inspección acudió personal veterinario y se encontró un nuevo caballo muerto que había recibido un tiro en la cabeza.

Tras la localización de tres caballos más muertos en otra inspección de los Mossos, dos de ellos con signos de haber sido matados a tiros, los agentes identificaron al propietario, que será investigado por maltrato animal. También se le intervino un arma de fuego con la que, presuntamente, habría disparado a los equinos.

FAADA agradece la intervención de los agentes, pero lamenta que no se haya decomisado a todos los caballos, «sobre todo teniendo en cuenta que es evidente que sus vidas corren peligro», señalan, y agregan que seguirán presionando para el decomiso y para lograr la pena máxima posible para el responsable.