Los acusados afirman que el programa se grabó mientras los cerdos estaban afectados por una infección vírica

Este jueves ha comenzado el juicio contra los hermanos Carrasco, propietarios de la granja grabada por el equipo del programa Salvados junto a Igualdad Animal, cuyas imágenes impactaron a todo el país.

El perito judicial ha concluido que se produjo maltrato animal por omisión, pues las hernias y lesiones que presentaban los cerdos parecían llevar semanas sin tratarse, de forma que se alargaba el sufrimiento de los animales, que en muchos de estos casos no pueden ni siquiera tumbarse debido al tamaño de las hernias.

Además, el inspector veterinario que visitó la granja tras la emisión del programa, ha reconocido que en ella había más del doble de animales muertos de lo que es habitual en granjas similares.

También ha comparecido uno de los cámaras del equipo de Salvados, quien ha señalado que «había cerdos por todas partes, otros en condiciones terribles y con malformaciones. Lo que más me llamó la atención al salir fueron los contenedores llenos de animales muertos, pudriéndose. No he olido nada igual en toda mi vida», según recoge Igualdad Animal.

Desde la organización, su cofundador, Javier Moreno, ha declarado que «es la peor granja que he visto en mi vida, había cerdos enfermos mirases donde mirases, era una cuestión de salud pública».

Por su parte, los hermanos Carrasco se han defendido diciendo que durante los días en que se grabaron las imágenes la granja estaba afectada por una infección vírica contagiosa y que la suciedad se debía a los nebulizadores que se colocan para refrescar, al mezclarse las heces con agua. Uno de los dueños asegura no haber visto jamás imágenes como las del programa.

La fiscalía acusa a los propietarios de un delito continuado de maltrato animal, y pide para ellos 18 meses de prisión y la prohibición de la tenencia de animales durante cuatro años. Como acusación popular, Igualdad Animal, les imputa 14 delitos de maltrato animal y pide una pena de tres años de prisión, el máximo previsto por la ley, y nueve años de prohibición para la tenencia de animales.

Debido a la amplia cantidad de testigos citados, el juicio no ha concluido y se reanudará el próximo viernes, 2 de febrero a las 10:00 horas.