Me encanta la tortilla de patata, aunque reconozco que ya no la cocino tanto como antes de ser vegana, si bien es verdad que nunca se me ha dado especialmente bien esta receta, en comparación con otras que he probado. Como no podía ser de otra manera, este tradicional plato también se puede veganizar, y hay muchas maneras de hacerlo. Yo tardé un poco en encontrar la que mejor me funciona, y mi truco es sustituir el huevo por harina de garbanzos mezclada con agua. Antes de dar con esto, probé otras harinas, pero casi siempre se me rompía y aunque de sabor quedaba bien, no era lo mismo. Es verdad que en esta receta se nota el sabor de la harina de garbanzos, pero puedo asegurar que también sabe a tortilla y que está muy rica.
En este caso, además de patatas y cebolla (porque a mí la tortilla me gusta con cebolla), añadí otras verduras. Aquí os enseño cómo la preparo.
INGREDIENTES
- Patatas (cantidad en función de lo grande que sea la sartén y del tamaño de las propias patatas. Yo utilicé dos)
- 1 Cebolla
- Medio calabacín
- 2 pimientos verdes o rojos
- 1 Tomate pequeño
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Harina de garbanzos
- Agua
ELABORACIÓN
- Lo primero que tenemos que hacer es cortar en trozos pequeños las patatas y el resto de las verduras (el calabacín, la cebolla, los pimientos y el tomate).
- Ponemos aceite de oliva virgen extra a calentar en una sartén.
- Cuando el aceite esté caliente, añadimos las patatas y las verduras, hasta que cubran toda la sartén. Si se cubre sin que hayas podido echar todos los ingredientes, espera un poco hasta que disminuyan según se van cocinando y podrás echar el resto.
- Añadimos sal y removemos.
- Dejamos que se cocinen las patatas y las verduras, removiendo de vez en cuando, y cuando estén blandas comenzamos a preparar el sustituto del huevo. Para ello, ponemos dos cucharadas soperas de harina de garbanzos en un bol, añadimos agua y removemos. La textura tiene que ser similar a la que haría el huevo, así que podemos añadir más harina y agua hasta conseguirla. En este punto, puedes añadir un poco de sal.
- Después, introducimos en el bol las patatas y las verduras de la sartén y mezclamos todo muy bien.
- Añadimos la mezcla en la misma sartén y dejamos cocinar, moviendo la sartén para que no se pegue.
- Dejamos unos minutos al fuego y damos la vuelta a la tortilla para cocinarla por el otro lado.
- Dejamos cocinar otro rato, moviendo la sartén hasta que esté hecha. Si vemos que aún le falta un poco, podemos darle tantas vueltas como sea necesario.
Un truco que puedes utilizar si quieres que la tortilla adquiera un color más amarillo y parecido al del huevo es añadir un poco de cúrcuma cuando realices la mezcla de las patatas y las verduras con la harina de garbanzos.
Como puedes ver, ni siquiera para una tortilla es necesario utilizar huevos. Las gallinas son explotadas durante toda su vida por estos alimentos, que ni siquiera necesitamos, ni para sobrevivir, ni para elaborar recetas. No pienses que los huevos proceden de gallinas felices, aunque sean ecológicos o del vecino del pueblo. Estos también conllevan sufrimiento, y no es tan difícil sustituirlos.
Gracias por compartir la receta. La probaré. En mi ciudad de vez en cuando organizan intercambios de ropa y la chica que lo monta siempre lleva una tortilla de patatas vegana ya en broma decimos que vamos allí por la tortilla.
Me gustaMe gusta
Espero que la pruebes y te guste 🙂
Gracias por tu comentario.
Me gustaLe gusta a 1 persona