¿Sabías que los pingüinos no viven en el Polo Norte? ¿O que no todos son blancos y negros? ¿O que roban huevos a otros pingüinos? Estas maravillosas aves nos dejan ciertos datos curiosos que seguramente no todos conocíamos. En La Zona Veggie, nos quedamos prendados de los documentales en los que aparecen, porque a cualquiera enamoran. Por eso hoy toca hablar de pingüinos. Unos animales que seguramente nos resulten ajenos por la lejanía, pero que no por ello pierden interés.
En el mundo, existen unas 18 especies diferentes de estas aves, que han perdido su capacidad de volar a lo largo de su proceso evolutivo, hace millones de años. Sin embargo, esa pérdida vino asociada a una ganancia, una mejor eficacia en el nado, pues las ágiles aletas eran incompatibles con la capacidad para volar de sus alas. Y es que los pingüinos pueden nadar a 35 kilómetros por hora, aunque en situaciones normales, lo hacen a unos cinco o diez kilómetros por hora.
Los pingüinos también son grandes saltadores, y pueden alcanzar hasta los dos metros de salto cuando salen del agua, algo que les ayuda a escapar de forma rápida cuando hay depredadores al acecho.
Estas aves nadadoras basan su alimentación en peces y otros animales marinos característicos de las zonas heladas donde viven. Eso sí, los pingüinos no habitan en el Polo Norte, a pesar del frío clima. Estos animales únicamente viven en el hemisferio sur del planeta. Solo una especie de pingüino ha logrado adaptarse al ecuador y habita en las Islas Galápagos. El resto vive en zonas frías, aunque su temperatura corporal puede mantenerse a 40 grados centígrados.
Otro dato que seguramente no sabías sobre los pingüinos es que, en general, no cambian de pareja en toda su vida. Estas aves forman parte del 5% de los animales que siempre se reproducen con el mismo individuo, si bien es cierto que las parejas de pingüinos a veces se separan. No somos tan diferentes.
Los investigadores han observado, además, que algunas pingüinas buscan a machos solteros, pero nunca a los que ya tienen pareja, para evitar enfrentamientos con otras hembras. Estas ponen un solo huevo, pero no son las únicas que lo protegen. A diferencia de otros animales, en este caso también los machos se encargan del cuidado de las crías. A veces, estas aves llegan a robar los huevos de otros pingüinos cuando pierden el suyo o cuando no lo han puesto.
Por si no era suficiente, otro dato curioso más: los pingüinos tienen la tripa de color blanco, mientras que su cabeza, espalda y brazos son negros, pero se ha descubierto a uno completamente negro.