La extracción de una hormona de yeguas embarazadas nutre la industria porcina en otros países
El Gobierno de Islandia ha aprobado una normativa por la que prorroga las granjas de sangre en el país hasta el 2025. Hasta entonces, se pretende recopilar los datos necesarios para decidir el futuro del negocio, consistente en la extracción de la hormona sanguínea de ferilidad PMSG de yeguas embarazadas para su uso en la industria porcina.
El Gobierno se encuentra ante la presión de la empresa farmacéutica Isteka, que ha sido notable durante la redacción del reglamento. En un primer momento, la norma ordenaba reducir la frecuencia de extracción de sangre de ocho a seis veces por cada embarazo, pero el reglamento final restablece la frecuencia a ocho extracciones, como pedía Isteka.
El 66% de los islandeses se oponen a la extracción de esta hormona en las denominadas granjas de sangre, según una encuesta del año 2021. El debate se desencadenó a raíz de la publicación de la película Islandia, tierra de 5000 yeguas de sangre. Ahora se ha publicado un nuevo documental; Islandia, el negocio oculto de la sangre, que analiza los avances del negocio desde que se grabó la primera producción.
El documental critica la extracción y el uso de la hormona PMSG, que se utiliza desde hace más de 40 años en la cría industrial de cerdos. La producción ha sido realizada por la Fundación Alemana para el Bienestar Animal (AWF) y Tierschutzbund Zürich (TSB).
Ante la falta de apoyo, los productores mantienen silencio, si bien en un informe del año pasado se habla de los daños que ha sufrido el negocio.
Presiones desde otros países
Otros grupos de presión extranjeros, como ganaderos de ovino y porcino de Francia, España, Italia y otros países se posicionaron también en contra de las intenciones iniciales del Gobierno. Sin embargo, en la Unión Europea, principal mercado de la hormona PMSG procedente de Islandia, la resistencia a su importación es creciente.
Organizaciones animalistas como Animal Welfare Iceland lamentan que la situación seguirá igual para los animales en Islandia.
La próxima revisión de la legislación sobre bienestar animal en la Unión Europea es una oportunidad para prohibir la producción, uso e importación de PMSG en los países miembro. Actualmente, está en marcha una recogida de firmas para pedir el fin de este negocio en la Unión Europea.
Fuente: Eurogroup for Animals.