Desde épocas muy remotas, el ser humano ha ido conociendo la naturaleza y al resto de los animales que habitan en ella de forma empírica, es decir, en base a lo que observaba,. Pero como en otros campos, llegó un momento en el que eso se hizo ciencia, y nació la zoología, que es, según la RAE, la ciencia que trata de los animales.
Desde las primeras civilizaciones, se ha estudiado a los animales, aunque en muchas ocasiones, esto se hacía para aplicarlo a la medicina humana y a través de métodos crueles como la vivisección.
El griego Aristóteles (384 a.C.-322 a.C.) es considerado un pionero en la zoología, y clasificó a los animales en dos grupos, aquellos con sangre y aquellos sin sangre, refiriéndose a los vertebrados y a los invertebrados, respectivamente. Destaca su obra De partibus animalium (partes de los animales), que fue utilizada durante siglos, y más concretamente hasta el siglo XVIII, cuando aparecieron los trabajos de Georges-Louis Leclerc de Buffon (1707-1788).
El médico romano Galeno (129-201) fue el primer filósofo en emplear el método experimental para sus investigaciones. Entre estas, estudió la función de los riñones y la médula espinal en los animales, pero para ello, recurrió a la vivisección de muchos de estos.
De la Edad Media, destacan los bestiarios, libros con relatos, descripciones e ilustraciones de animales, aunque entre ellos se incluían seres fantásticos como sirenas o unicornios, con una finalidad moralizadora; y entre los animales reales, las descripciones e imágenes no siempre se ajustaban a la realidad. De esta época, es más notable la aportación del mundo islámico que la de los cristianos, quienes no avanzaron mucho más de la teoría aristotélica.
En el siglo XIII, Alberto Magno (1200-1280) estudió a los insectos e intentó separar la fantasía y la mitología del estudio científico de los animales, para primar la observación y el método, aunque siempre bajo el prisma del cristianismo y sin perder de vista la idea del alma.

Ya en el Renacimiento, durante el siglo XVI, naturalistas como Ulisse Aldrovandi (1522-1605) recogían animales durante sus viajes con el fin de coleccionarlos. Pero de esta época destaca, sobre todo, Conrad Gessner (1522-1605), con su Historiae Animalium, que recoge el conocimiento sobre los animales hasta ese momento y supone un punto de partida para estudios posteriores.
A partir del siglo XVII, la zoología se desarrolló de forma considerable, y médicos y naturalistas se ocuparon de catalogar a los animales y estudiar más a fondo su anatomía y fisiología. René-Antoine Ferchault de Réaumur (1683-1757) describió a las diferentes especies de insectos, su anatomía, alimentación, reproducción, etc. Pero no fue hasta el siglo XVIII cuando comenzaron a realizarse investigaciones más metódicas de los animales, con científicos como Carl Von Linneo (1707-1778), considerado una especie de fundador de la zoología como ciencia y el padre de la taxonomía moderna.
Georges-Louis Leclerc de Buffon (1707-1788) destaca por los 36 volúmenes de su Historia natural, en la que compiló todo el saber de la época sobre las ciencias naturales y ya pensó en la posibilidad de una genealogía común entre el ser humano y los primates.

En el siglo XIX, la zoología tomó fuerza dentro del recientemente creado Museo de Historia Natural en París, donde Jean-Baptiste Lamarck (1744-1829) o Georges Cuvier (1769-1832) realizaron estudios sobre los animales. De hecho, Cuvier se considera el padre de la zoología moderna. En este siglo, la zoología comenzó a dividirse en diferentes disciplinas, como la ornitología o la entomología.
La zoología continuó su progresó gracias a la obra de Charles Darwin (1809-1882) y el evolucionismo, que nos dice que las especies han evolucionado a partir de uno o varios antepasados comunes gracias a la selección natural, una hipótesis que no fue aceptada hasta la década de 1930. Causó polémica por decir que descendemos del mono, aunque otros científicos ya lo habían dicho anteriormente, como Lamarck.
Como hemos visto, ninguna mujer aparece en los documentos más accesibles sobre la historia de la zoología, y ya que no siempre es sencillo obtener información relativa a siglos pasados, citaremos hoy a tres de las mujeres que han estudiado a los animales (y más concretamente, a los primates), en el siglo XX: Dian Fossey (1932-1985), Biruté Galdikas (1946-) y Jane Goodall (1934-).
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Álvarez, F. (s.f.). Historia de la etología.
Bellés, X. (2002). Conrad Gesner (1516-1565), monstrum eruditionis.
Gabinete del Grabado (s.f.). Ulisse Aldrovandi (1522-1605).
Revista Digital de las Bibliotecas de Vila-Real (s.f.). De Aristóteles a Darwin: una historia natural.
Rozo Mila, J. (2014). Filosofía y zoología en Aristóteles. Boletín Cultural Y Bibliográfico, 48(85), 111-112. Recuperado a partir de https://publicaciones.banrepcultural.org/index.php/boletin_cultural/article/view/642
Subelza, D. (s.f.). Historia de la zoología. Universidad de Jujuy.
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