En la actualidad, todos los medicamentos deben ser testados en animales antes de ser comercializados. Al menos así es en la Unión Europea, si bien esto está empezando a cambiar en países como Estados Unidos, donde recientemente se ha eliminado esta condición y los medicamentos pueden salir ahora al mercado sin necesidad de haber pasado por ensayos en animales, aunque todavía las farmacéuticas pueden optar por esto último. Pese a ello, este paso es muy importante en un país donde se utilizan 50 millones de animales en ensayos médicos. La cifra es más baja, pero igualmente escandalosa, en la Unión Europea, donde las víctimas son diez millones de animales.
Teniendo esto en cuenta, ¿pueden las personas veganas tomar medicamentos? Sobre esto hay diferentes opiniones en función de cada vegano. Hay algunos que piensan que si el veganismo es el rechazo al uso de los demás animales y actuar en consecuencia a esto en lo relativo al consumo, los medicamentos no son una opción para nosotros. Personalmente, creo que estos son una minoría entre las personas veganas, y tal vez esa minoría más cercana a la corriente anti-medicina, que por desgracia, a ves también se asocia con el veganismo, aunque no tiene nada que ver. Pero de eso hablaremos otro día.
Otra opinión, quiero pensar que más extendida, es la de que las personas veganas sí podemos tomar medicamentos, porque nuestra lucha solo es viable si somos personas sanas y vivas, no enfermas. Y es que en estos momentos, no tenemos alternativa, así como sí la tenemos en el ámbito de la cosmética. Si estamos enfermos y tenemos que medicarnos, solo podemos hacerlo con fármacos testados en animales.
Lo que sí podemos hacer es seguir alzando la voz para pedir que se utilicen métodos alternativos a la experimentación animal en la medicina. Esto no es ningún disparate. Estas alternativas existen y han sido estudiadas, pero detrás de las pruebas en animales hay todo un negocio de cría de primates, conejos, beagles o ratones cuyos responsables también se llevan su parte. Y desgraciadamente, están amparados en la legalidad, a pesar de que más del 90% de los ensayos de medicamentos en animales fracasan en la siguiente fase, la de los ensayos en humanos, la verdaderamente relevante para el avance de la medicina. ¿Nos hacemos una idea de la cantidad de estos avances que nos hemos perdido o que nos estamos perdiendo por seguir obligando a las farmacéuticas a probar los medicamentos en animales en lugar de invertir en alternativas?
Otra cosa que sí está en nuestra mano es evitar los medicamentos que contienen ingredientes de origen animal, como lactosa o carmín de cochinilla. En estos casos, podemos pedir a nuestro médico que nos recete otro similar sin esos ingredientes, aunque muchas veces, nos daremos cuenta de los ingredientes después de haber acudido a la farmacia a comprar el medicamento en cuestión, porque no a todos se nos ocurre que un jarabe puede contener carmín de cochinilla, así como no se nos ocurre que unas patatas fritas contengan lactosa.
En definitiva, en nuestro contexto, es una irresponsabilidad difundir el no uso de medicamentos ante enfermedades, y sobre todo, ante patologías graves, tanto si somos personas veganas como si no lo somos. En veganos, como ya he dicho, somos más eficaces estando sanos, sin dolores y curados de enfermedades, por lo que yo sí tomo medicamentos, aunque no por ello dejaré de decir que me parece una atrocidad la experimentación animal, ya sea en el ámbito de la medicina o en otros.
Déjame decirte algo: tanto si tomas medicamentos como si no, te van a criticar. Si los tomas, serás el blanco de veganos anti-ciencia que no creen en la medicina o de no veganos que buscan lo que creen que son tus puntos débiles para decirte que no eres coherente y que no te llames a ti mismo «vegano». Si no los tomas, y con razón, serás tachado de irresponsable.
Es curioso cómo hay personas veganas que renuncian a los medicamentos o que miran mucho cuáles consumir y cuáles no, mientras que otras personas se dedican a decir que los veganos necesitamos medicamentos para sobrevivir porque la alimentación basada en plantas no es saludable. No sé si se refieren a medicamentos o a suplementos, pero lo que sí sé es que estas personas no tienen ni idea.
Un último apunte: si eres una persona vegana, puede que tengas que recurrir a menos medicamentos que la población general. Y es que diferentes estudios afirman que la dieta basada en plantas reduce el riesgo de sufrir determinadas enfermedades bastante comunes. De estos estudios habla Lucía Martínez en su libro Vegetarianos con más ciencia (2022). La alimentación cien por cien vegetal no deja de ser otra manera de evitar tener que recurrir a una pastilla para tratar una enfermedad, porque si llevas una dieta sana y equilibrada, tal vez no te llegue esa enfermedad. No quiero decir con esto que las personas veganas somos inmunes a todo y que nuestra alimentación es milagrosa, porque no lo es y el veganismo tampoco va de dietas milagro.
Mi consejo es que tomes medicinas cuando sea necesario. Si no lo haces y eres vegan, puede que estés poniendo en peligro tu salud y tal vez llegue un momento en el que no te quede otra opción que recurrir a la medicina.